El domingo comienza de nuevo con sorpresas. Hoy tenemos otra nueva voluntaria, “Aida”, profesora de Tai – Chi, que es un arte marcial, una forma de gimnasia y una filosofía de vida, basada en la concentración y en la relajación. Quiere compartir con nuestros usuarios sus conocimientos y dar unas clases magistrales con ellos. Así que volvemos a preparar asamblea, esperando que llegue “Acacio” con los usuarios de San Gil. Destacar de nuevo la presencia de “Adela” que se encuentra muy cómoda con nosotros y con mucha motivación para seguir participando en el club de ocio. Una vez realizada las oportunas presentaciones, comenzó la clase, primero fue Aida junto con nuestra compañera Prado las que se pusieron a realizar los ejercicios, como primera toma de contacto. Destacamos lo pendiente y callado que estuvieron nuestros usuarios en todo momento, amenizados por una música relajante que llevaba a estar muy pendiente de los movimientos que se realizaban.
Después de esta primera toma de contacto, se les animo a realizar junto a ella los ejercicios, muchos quisieron participar, incluso los que estaban en sillas de ruedas quisieron participar. Por lo que la acogida fue muy buena por parte de nuestros usuarios. Pero no solo los usuarios, por supuesto los monitores y cuidadores también fueron los primeros en realizar los ejercicios, creando una motivación extra.
Al finalizar la clase, un tremendo aplauso engrandeció el momento. Tras un consenso con la monitora decidimos aplazar la siguiente clase para otro día, con el fin de no hacer muy pesada la actividad y sigan con las mismas ganas y motivación.
Y sin más preparamos la salida, que en esta ocasión nos llevaba al parque de La Isla. Una vez allí realizaríamos un paseo hasta el Parque anexo del Cachón, donde se encuentran unas máquinas de gimnasia de mantenimiento muy divertidas. Os mostramos como se lo pasaron nuestros usuarios. La alegría que llevaban durante el paseo era tremenda, motivados por la presencia de las dos voluntarias que nos quisieron acompañar en todo momento.
De regreso al transporte, los usuarios transmitían sus impresiones de lo acontecido en el día de hoy. Una vez en el Cispla recogimos el material y dimos por concluida la jornada.
No me quiero despedir sin hacer una reflexión acerca de la importancia del voluntariado. Este fin de semana han sido dos voluntarias, Adela y Aida (también quiero tener un recuerdo para Julián que por la mañana llevó a algunos usuarios a ver el fútbol del Ciudad de Plasencia en La Vinosilla). Pero todos sabemos que en nuestra asociación muchos hacemos voluntariado aparte de nuestro trabajo. Lo hacemos por el placer y lo agradecidos que vemos a las personas con discapacidad intelectual. El sentir que lo que haces tiene un bien social no está pagado con dinero. Pero cierto es que también te gusta que te lo agradezcan desde fuera, sobre todo los que nos dedicamos al proceso de formar a personas. Por eso desde aquí queremos dar las GRACIAS con todas nuestras fuerzas a todos/as que de una forma u otra colaboran con este colectivo que tanto lo necesita. Exaltando la importancia del voluntariado y queriendo trasmitir la idea de continuidad y que no se quedé aquí. “El valor de lo cotidiano, apostemos por la calidad del día a día”, referente de nuestra asociación. Un saludo para todos/as de Jesús Ginés.
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